Es Pa Gros i sa Mesquida (Foto: Jordi Saragossa).

Camí de Cavalls 360º en 10 días #01: Maó – Favàritx

Los primeros veinte kilómetros de Camí de Cavalls 360º incluyen grandes atractivos, como el Parc Natural de S’Albufera des Grau, el espacio protegido más importante de la isla. Además, también se pueden ver ejemplos de vegetación autóctona, torres defensivas y solitarias calas vírgenes.

Mapa del programa Senderisme 10 etapes de Camí de Cavalls 360º. Tram 1.
Mapa del programa Senderismo 10 etapas de Camí de Cavalls 360º. Etapa 1.

Camí de Cavalls 360º pone a disposición de los participantes un buen número de modalidades, fórmulas y formatos para disfrutar de la ruta con un recorrido adaptado a su ritmo, nivel y disponibilidad de tiempo. El programa Senderismo 10 etapas es uno de los que mejor se ajusta a senderistas con una mínima experiencia y que busquen rutas de dificultad media.

Los 185 kilómetros de distancia y 2.741 metros de desnivel positivo se reparten en diez jornadas asequibles, de unos veinte kilómetros de media. Los participantes solo deben pensar en disfrutar de los paisajes y parajes a su paso. El equipo de la organización nos ocupamos del resto: el asesoramiento sobre el recorrido y posibles variantes, las cuestiones logísticas e incluso los traslados hacia los alojamientos cuando no se pueda llegar caminando.

ETAPA #01: MAÓ – FAVÀRITX

ETAPA #02: FAVÀRITX – SES SALINES DE FORNELLS

ETAPA #03: SES SALINES DE FORNELLS – CAMÍ DES ALOCS

ETAPA #04: CAMÍ DES ALOCS – CALA MORELL

ETAPA #05: CALA MORELL – CIUTADELLA

ETAPA #06: CIUTADELLA – CAP D’ARTRUTX

ETAPA #07: CAP D’ARTUTX – CALA GALDANA

ETAPA #08: CALA GALDANA – SON BOU

ETAPA #09: SON BOU – BINIBÈQUER VELL

ETAPA #10: BINIBÈQUER VELL – MAÓ

Altimetria del tram 01 del programa Senderisme 10 etapes de Camí de Cavalls 360º (Maó-Favàritx).
Altimetría de la etapa 01 del programa Senderismo 10 etapas de Camí de Cavalls 360º (Maó-Favàritx).

Distancia: 20,37 km / Desnivel: 403 m

El punto de partida de Camí de Cavalls 360º es la antigua ciudad de Maó. Históricas calles y plazas empedradas conectan edificios con valor monumental como el ayuntamiento, la iglesia de Santa Maria o el mercado del Claustre del Carme. La oferta de restauración y los escaparates de tiendas llenas de encanto y fuera del estereotipo turístico completan el dibujo.

La parte antigua de la población se extiende sobre una línea de acantilados que se elevan sobre las aguas del Port de Maó. Con sus seis kilómetros de longitud, es el mayor puerto natural del Mediterráneo y la referencia para iniciar la ruta.

Sa Mesquida (Foto: Joan Febrer).
Sa Mesquida (Foto: Joan Febrer).

De Maó a Sa Mesquida

Una carretera asfaltada conduce en seis kilómetros desde el Port de Maó hasta el pequeño núcleo de Sa Mesquida. El asfalto llega hasta el aparcamiento de la amplia playa de Cala Mesquida, de aguas transparentes y arena blanca, delimitada a cada lado por una torre de defensa inglesa del siglo XVIII y un peñón de casi setenta metros de altitud, denominado Es Pa Gros.

Amb el Macar de Binillautí al fons (Foto: Jordi Saragossa).
Con el Macar de Binillautí al fondo (Foto: Jordi Saragossa).

De Sa Mesquida a Es Grau

En Cala Mesquida nace una senda que resigue la costa en un sube y baja constante y que permite descubrir los primeros tramos de marinas y de calas rocosas que tan bien definen buen parte del litoral menorquín. Esta sección es especialmente agradecida durante la primavera, cuando las flores de brezo, mirto y jaguarzo morisco tapizan el paisaje de color blanco. A la vez, es posible admirar algunas comunidades de socarrells, un tipo de arbusto endémico que adopta una característica forma de cojín espinoso.

Más adelante, en Binillautí, aparece el primer ejemplo de macar, nombre con el que se conocen las playas o calas de guijarros en la isla. Que el viento, los embates del mar y la sal han modelado estas costas durante milenios, se pone de manifiesto solamente viendo el paisaje.

Coincidiendo con la Caleta de Binillautí, el recorrido da la espalda al mar momentáneamente y penetra en el territorio del Parc Natural de S’Albufera des Grau. La primera sección dentro del área protegida, no obstante, enlaza enseguida con la carretera de acceso a la población de Es Grau.

Este encantador núcleo tiene una larga tradición como destino de veraneo para los habitantes de Maó, que comenzaron a edificar sus segundas residencias ya a finales del siglo XIX. Hoy en día, es un centro turístico bastante activo, con una notable vida social, aun manteniendo su carácter original relajado y de reminiscencias marineras.

Albufera des Grau (Foto: Camí de Cavalls 360º).

De S’Albufera des Grau a Favàritx

Unos 300 metros antes de llegar al pueblo de Es Grau, un desvío a mano izquierda se adentra en el paraje de S’Albufera, zona núcleo de la Reserva de Biosfera y hábitat de numerosas especies de aves en pleno trayecto migratorio entre África y Europa. Existe la posibilidad de acercarse hasta uno de los miradores del Parc Natural y observar algunos ejemplares de fauna en las aguas de la laguna.

El camino continúa llano hasta el extenso arenal de la Platja des Grau y su característica forma de concha. Al cruzar la playa, el sendero se estrecha y gana desnivel en dirección norte hasta la solitaria Cala des Tamarells. Vale la pena disfrutar de la panorámica con la Illa d’en Colom enfrente y la Torre de Rambla en el lado norte. Se trata de otra edificación defensiva de planta circular levantada por los británicos durante su dominación de la isla en el siglo XVIII.

Los kilómetros siguientes, el recorrido alterna tramos de interior con calas vírgenes como la de Sa Torreta, la de En Cavaller o la de Morella Nou. Cuando ya se acerca el final de la etapa, se abren Cala Tortuga y Cala Presili. Son dos playas muy apreciadas para el baño, gracias a su arena blanca y fina, que además proporcionan las mejores perspectivas del Far de Favàritx.

Platja d'en Tortuga o Arenal d'en Morella (Foto: Oriol Batista).
Platja d’en Tortuga o Arenal d’en Morella (Foto: Oriol Batista).

Far de Favàritx

Este tramo de Camí de Cavalls 360º acaba en la carretera de acceso al faro. Para llegar, solo hay que seguirla durante unos 850 metros. El premio al esfuerzo extra es un paisaje dominado por la roca de color negro, que le confiere un aspecto lunar.

El entorno cuenta también con una fotogénica balsa temporal conocida como Cós del Síndic. Se inunda con las tormentas y es el hábitat de aves limícolas y plantas acuáticas poco comunes.

Al fondo, el Cap de Favàritx y su faro marcan el extremo nororiental de Menorca. Fue inaugurado en 1922 para completar la iluminación de la costa norte de la isla como complemento de los faros de Cavalleria y Punta Nati. Su torre de 28 metros de altura, pintada de blanco con una banda negra helicoidal, contrasta con la dureza natural de su entorno.

Cap de Favàritx (Foto: Joan Febrer).
Cap de Favàritx (Foto: Joan Febrer).