Hace unas cuantas semanas, Lachlan Morton estableció un nuevo tiempo más rápido conocido (FKT) de Camí de Cavalls 360º Non-Stop MTB. El ciclista australiano del EF Education First completó los 185 km de la vuelta a Menorca en 10 horas y 12 minutos. Esta es la entrevista que le hicimos el día después.
¿Cuál era tu objetivo cuando decidiste venir aquí a hacer este reto? ¿Y cómo te lo planteabas a nivel mental?
Sinceramente, mi objetivo original al venir aquí fue sencillamente ver la isla. Pasé tiempo en Mallorca al principio de ser profesional, hace años, y todo el mundo allí me día: “oh, si te gusta esto, deberías ir a Menorca”. Desde entonces, lo tenía en la cabeza, y me decía “un día iré”.
Entonces surgió la oportunidad de venir. Yo no sabía nada sobre el camino y empecé a investigarlo y vi que tenía una historia en relación con el BTT y el running. Viendo las características del camino pensé “ok, parece verdaderamente interesante y un desafío de verdad”. Así que mi objetivo al venir era básicamente descubrir la isla y ver de qué iba el camino.
Desde una perspectiva competitiva, principalmente se trataba de ver qué podía hacer en el camino. Tengo mucha más experiencia en mountain bike de la que tenía hace pocos años, pero no provengo del mountain bike. Así pues, es bonito venir a un sitio, encontrarme en un recorrido de auténtico mountain bike y ser capaz de probarme contra mountain bikers muy consolidados.
¿Pensabas que era posible rebajar el tiempo marcado por Ismael Ventura?
No pensaba que fuera a ir más rápido. Por lo que había visto del camino en los días previos, es muy exigente y específico. Intenté no pensar sobre el tiempo cuando salí. Solo intentaba ir tan rápido como podía, disfrutando de lo que hacía y sin estresarme por el resultado, y luego simplemente ver qué conseguía.
Tuve suerte de que aquel día mi cuerpo acompañó. Me sentí realmente bien físicamente y fui capaz de apretar fuerte. Porque a veces eso no sucede y luchas contra ti mismo todo el rato. En retrospectiva, no me preparé específicamente, pero ahora que sé cómo es la ruta, creo que el último mes de entrenamientos fue perfecto. Todo sucedió por accidente, pero no cambiaría demasiadas cosas, ahora.
Y creo que mi mentalidad me ayudó. Creo que es un camino que, cuanto más intentes forzarte, más despacio acabas yendo, porque vas cometiendo pequeños errores y te vas frustrando, y la frustración se convierte en otro fallo… Básicamente tienes que estar realmente concentrado en lo que estás haciendo, pero al mismo tiempo relajado sobre la bici e intentando mantenerte constantemente en movimiento sobre las rocas y trabajando tanto como puedas con el terreno. Porque constantemente te está intentando frenar. Parece que el camino te agarra e intenta hacerte ir más lento. Y si puedes trabajar con él lo mejor que puedas, creo que la progresión es más fácil.
A pesar de que yo no estaba totalmente determinado a hacer el récord, creo que todo salió de un modo que me permitió ir rápido. Fue un bonito resultado, pero en definitiva sé con toda seguridad que vendrá alguien y batirá este récord. Hay gente que está fuerte… Hay gente que es mejor que yo en cada aspecto de los que requiere el camino. Y además yo perdí tiempo en unos cuantos puntos, así que no hay duda de que lo batirán. Como en todos los récords, lo van a batir. Así que o estoy demasiado encariñado con el hecho de tener el récord, porque una vez haya caído estoy seguro de que continuaré teniendo un bonito recuerdo de este día. Es bonito afrontarlo de manera que sea más que el récord.
No creo que nunca me haya gustado el hecho de ostentar un récord. Un récord solamente supone un progreso en los estándares. Básicamente, cuando la gente se da cuenta de que puedes hacerlo en diez horas, entonces verás rápidamente que alguien puede hacerlo en menos de diez horas. Es bonito formar parte de ello y también es bonito haber pasado un día que fue más que el simple hecho de establecer un récord.
Me gusta la manera con que describes cómo gestionas un camino que intenta frenarte, “no forzarte”, esa es realmente la mentalidad correcta…
He aprendido a partir de la experiencia ganada en otras carreras de ultra resistencia que es muy fácil frustrarse, y he aprendido que cualquier sentimiento negativo que tengas solamente hará que frenarte. Hay literalmente miles de sitios donde frustrarse en esta vuelta. Muchísimos puntos en los que puedes fallar y cometer un pequeño error. Creo que puedes hacerlo cien veces y nunca seguirás las líneas correctas, porque constantemente tienes que elegir una línea; o nunca encontrarás todos los caminos perfectamente y puede ser irritante girar por el camino equivocado durante cinco segundos y entonces darte cuenta de que tienes que volver atrás… porque eso te pasa, es inevitable. Así que básicamente tienes que mantener concentrado en avanzar.
¿Qué sentiste cuando llegaste a Ciutadella después de completar la primera mitad en el norte?
Creo que la primera mitad es engañosa… Las primeras dos horas son probablemente el tramo más fácil de todo el camino, lo cual te da esa falsa sensación de seguridad. Y entonces te adentras en Mordor y las rocas, y te devuelve directamente a la realidad. Esa parte es brutal.
Y cuando llegué a Ciutadella era más o menos a mitad de camino, pero también sabía que allí es donde las cosas se ponen normalmente interesantes. Cuando pasas de cinco horas, allí es cuando la cosa se convierte en algo diferente a una salida en bici normal. Entonces es cuando mentalmente tienes que estar más centrado porque las cosas se te pueden descontrolar rápidamente.
En cuanto al ritmo, en un evento largo como este, creo que la gente intenta hacerlo muy lineal, mientras que yo siempre he pensado que “si te encuentras bien, aprieta fuerte”, pues ya te encontrarás mal en algún punto y tendrás que ir despacio… Y si no aprietas cuando te encuentras bien, te sentirás mal igualmente y habrás perdido todas las opciones de ser rápido. Probablemente, eso no es lo más correcto, pero es la manera que yo tengo de hacerlo. Así que igualmente intentaba apretar porque me estaba encontrando bien.
Es difícil pensar en este camino en global, cuando cada momento requiere tantísima atención. Es bonito, en el sentido de que no puedes anticiparte a ti mismo. En el mismo segundo en que empiezas a pensar “solo queda cuarenta kilómetros”, tienes una sensación que es verdaderamente difícil y piensas “¡uf, cuarenta kilómetros son muchos!”. Especialmente porque no sabía cómo sería cada pequeña sección; podían ser realmente lentas. No dejo nunca que mi mente vaya mucho más por delante de mí.
Así que ser lineal en tu ritmo no fue una estrategia, sino suerte…
¡Fue suerte, sí! La gente siempre pide consejos para este tipo de cosas, y siempre me siento mal de darlo porque básicamente ¡yo hago lo contrario! [Ríe]
¿Qué consejo le darías a una persona que no esté intentando batir el tiempo más rápido, sino que es alguien para quien el simple hecho de hacerlo sea el reto de su vida?
Le diría que es un reto mayúsculo. No es como una fácil ruta turística. Es un desafío de verdad. Le diría que el camino no es nunca divertido, pero siempre es gratificante. Las secciones duras son duras, y pensarás “¿qué estoy haciendo?”… Pero cuando las has pasado te sientes como “vale, realmente ha valido la pena porque ahora estoy en esta playa virgen”.
Mi consejo sería estar mentalmente preparado para las dificultades, pero la recompensa merece absolutamente la pena.
Has descrito un poco la mitad norte… ¿Cómo describirías el sur, en comparación con el norte?
Este camino es único y te encuentras una buena variedad de paisajes y terrenos a pesar de que la isla sea pequeña. Se hace extraño que haya tantos microclimas por los que vas pasando. Yo diría que el norte es salvaje, es rocoso, expuesto… Y es verdaderamente duro. Y a medida que te diriges hacia el sur, los caminos son un poco más húmedos, hay secciones de bosque que son bastante verdes… Y aunque no puedo decir que tenga flow, sí que te parece que lo tenga, después de haber ido por rocas durante veinte kilómetros [ríe]. También es un poco más llano y rápido.
Me encantaría pedalear cada parte del camino otra vez, pero no del tirón [ríe]… Hacerlo en días separados. Merece la pena, sería bonito pedalear algún tramo en sesiones diferentes, porque es bastante divertido.
En este sentido, ¿qué piensas del proyecto Camí de Cavalls 360º relacionado con Menorca y el camino?
Creo que es un proyecto muy guapo. Creo que es un camino muy chulo que merece reconocimiento. Y ya puedes ver que hay gente en la comunidad de la resistencia, donde hay gente de las carreras de montaña y del mountain bike, que miran el camino y dicen “es un desafío único y grande”. Así que pienso que es un buen lugar para que los deportistas de resistencia vengan y se prueben a sí mismos. Y es un lugar increíble donde, de otra forma, quizás no tendrías la necesidad de venir.
Para mí, el camino fue la excusa por la que yo quería venir aquí. Pero pienso que, independientemente de lo bonito que es Menorca, vale la pena venir a hacer el camino por él mismo. Y creo que está bien que se haya establecido como una ruta cronometrada, y a la vez una ruta increíble para hacer como vuelta de unos cuantos días.
¡Pienso que es genial! Porque hay otros caminos que he hecho que… Lo compararía con Kokopelli, que es bastante conocido en Estados Unidos. Es una especie de camino establecido y muchos mountain bikers quieren ir, aunque diría que aquí es más difícil. Es una jornada más dura para intentar hacerlo en un día.
Has dicho que hay otros que están más fuertes y son mejores que tú en todo lo que requiere el camino… ¿En quién piensas?
Próximamente, Guillem Cassú vendrá a hacerlo y será rápido. Tiene la capacidad de hacer la vuelta rápidamente si pone la mentalidad adeacuada. Pero vaya, si alguien como Tom Pidcock viene y se lo toma como un reto, si decide que es algo que quiere venir a hacer, sería increíble. Hay gente que claramente puede hacerlo más rápido.
Volviendo a las razones para hacerlo, yo nunca intento probar que soy mejor que todos porque no estoy bajo la ilusión de serlo. Siempre hay alguien mejor. Mi esperanza es hacer que un proyecto como este avance un poco más. Creo que hay un conjunto de gente que podría hacerlo. Solo es cuestión de que se comprometan, que es una historia diferente.
¿Cómo fue tu experiencia al cruzar la línea de llegada después de completar toda la vuelta?
Es bonito. Acabar siempre es especial, porque es la conclusión de la experiencia, pero cada vez me doy más cuenta de que en las aventuras o retos más exitosos que he hecho toda la recompensa se encuentra en hacerlos. Cualquier cosa que haya hecho en la que me haya concentrado en la línea de llegada para poder celebrarlo, siempre he tenido una sensación verdaderamente duradera de que lo importante era realmente el hecho de estar haciéndolo. Desde que me di cuenta de ello, he aprendido a estar más presente mientras estoy en el transcurso de la actividad y no demasiado concentrado en llegar a la meta. Porque si tienes una experiencia verdaderamente exitosa y positiva, la llegada es un poco triste porque significa que se ha terminado
¿Recuerdas lo primero que dijiste cuando llegaste después de hacer estos más de 180 km?
¡Oh, por supuesto! El término que utilizan en Estados Unidos es hacer el yo-yo… Mientras lo hacía iba pensando: “son 360º, y si lo haces en ambas direcciones serían 360 km”. Y si lo hicieras en las dos direcciones, te harías una idea real y verdadera sobre el camino, y sería bonito porque podrían ser unas 24 horas, creo. Son muchos factores bonitos que lo harían una cosa guapa de hacer. Sinceramente, me lo estaba pasando tan bien dándole vueltas a la idea que pensé: “¡Podría hacerlo ahora mismo!”.
Si tuvieras que elegir una sola cosa para conservar de la experiencia, ¿cuál sería?
Viví un montón de momentos realmente bonitos. Creo que básicamente desde la primera sección de playa, cuando entramos en el camino propiamente dicho a partir quizás del kilómetro 5 o 6 hasta casi la entrada de Maó, creo que estuve en un estado de flow total. Y no hubo demasiados momentos en los que esto se rompiese. Es increíble. Estaba viviendo completamente el momento, pensando exclusivamente en lo que estaba haciendo durante casi diez horas, que es algo que no sé si había vivido antes en mi vida. Es difícil de repetir. Así que eso es claramente lo que elegiría. Fue un privilegio vivir esta experiencia.
¿Diez horas en estado de flow? ¡Normalmente ya es difícil estar en estado de flow incluso por unos minutos!
Esta es la razón por la que no me gusta detenerme. No tiene nada que ver con el tiempo, no se trata de “puedo ganar 30 segundos”, es más bien como “no quiero distraerme cuando estoy en el espacio mental de lo que estoy haciendo”. Especialmente, cuando vas avanzando. Es fácil que algo que diga alguien se te meta en la cabeza, y puede darle la vuelta completa a tu estado de ánimo. Eso es algo que no puedes controlar, sino que se te mete en la cabeza… Por eso lo hago de la manera en que lo hago. Me gusta llegar, coger lo que necesito, y no me gusta charlar o hablar, no quiero saber nada sino solamente regresar a mi mundo. Y esto fue especialmente verdad durante la vuelta porque estaba en un espacio tan bonito que lo único que necesitaba era mantenerme en él.
Pensando en las personas que planean venir y hacerlo en varias etapas, ¿de qué manera les recomendarías hacerlo?
Creo que deberías contemplar lo que sea que consideres tu límite diario normal y entonces hacer la mitad cada día. Porque el terreno es lento. La cantidad de esfuerzo que yo le puse para marcar una media que creo que sería de unos 18 km/h… Si tuviera que poner ese esfuerzo en Leadville (Colorado), por ejemplo, probablemente me saldría una media de unos 27 km/h. Es un camino muy difícil pero a la vez muy gratificante, así que pienso que es un error sobreestimar tu capacidad y presionarte para completar una distancia que quizás está más allá de tu alcance, y entonces perderte el entorno. Porque no hay duda de que vale la pena tener tiempo de detenerte y mirar a tu alrededor, disfrutando del momento. Yo hago lo mismo. Cuando voy a pedalear por placer, suelo pensar “haré 180 km, será genial”, pero ahora pienso que “120 km están bien”. Cuando realmente intento disfrutar, es suficiente con que sea un reto adecuado pero que no sea demasiado como para no permitirte disfrutarlo. Así que yo diría: date tiempo extra, no lo dudes.